Uruguay perdió 1-0 con Argentina en Mendoza por la séptima fecha de Eliminatorias. Otra vez la Celeste quedó sin himno y los charrúas tuvieron que terminarlo a capela. Hay que sumarle que jugaron 45 minutos con un hombre de más por la expulsión del Argentino Dybala. Messi anotó el gol de la Selección Albiceleste con un rebote de “Josema” Giménez.
Cuando inició el partido, el panorama ya marcaba cierta
postura. Argentina manejaba más la pelota y la distribuía con facilidad, aunque
no llegaba con riesgo al arco.
Los primeros 10 minutos de juego se vio interrumpido constantemente,
situación que se fue dando por las faltas cometidas durante el partido que terminó
arrojando un promedio de 8 amarillas en total, con una expulsión
para Dybala.
Uruguay como usualmente demuestra, se mantuvo fuerte en
defensa con algunos errores de por medio que lo menciono solo para
perfeccionar. Godín y Silva de lo mejor. Si no es por un lado, es por el otro
porque “Josema” también aportó lo suyo, aunque esta vez no fue tan certero en
sus movimientos. Igualmente hizo un buen trabajo y si de gustos personales se
tratase, siempre lo elegiría, ya que es de los pocos jugadores que le pone “garra
y corazón”. Se podría decir que esas características también me vienen a la
mente con la forma de juego del “Cebolla” Rodríguez, que en esta oportunidad se lo
vio desmotivado, seguramente por la seguidilla de lesiones que arroja desde hace un tiempo.
Suárez tuvo una primera intervención a los 23 minutos cuando
intentó desde larga distancia sorprender al arco contrario, que tuvo la
respuesta de un golero eficaz. Argentina también tuvo una peligrosa por parte
de Dybala antes de que mediante Messi, llegara el gol a los 41 minutos, cuando la
pelota se estrelló en el palo izquierdo de Muslera que hizo suspirar a todo un
país ya que terminó rebotando en la espalda del golero y amagó a entrar, aunque por suerte se desvió hacia arriba.
El primer tiempo se fue con el festejo del diez albiceleste,
que mediante una jugada con pizca de magia (frenó, dio vuelta entera y
entrelineas) puso en la red del país de los tres millones de habitantes el primer y único gol para Argentina. Uruguay
se fue al vestuario, con una muy buena actuación en defensiva pero poco y nada
en ataque, lo que le permitió a Argentina avanzar siempre y poseer la pelota la
mayor parte del primer tiempo.
Para la segunda parte, la “Celeste” mejoró por dos motivos;
quedamos con la ventaja de un hombre de más, y por otro lado, hubo un cambio en
nuestro sistema táctico que demostró una mejor conexión entre los jugadores. A
gusto personal, una formación que no me simpatizó y convenció en lo absoluto la
que propuso Tabárez en sus inicios. Cavani debería jugar de delantero como lo
hizo en el cierre, para poder tener más asistencia y chance de gol.
Si pasase el maestro por enfrente, estoy segura que ningún uruguayo se aguantaría las ganas de gritarle (como reclamando) ¡Solito el Suarez! como
quien juega una quiniela de 20 pesos a la cabeza solito el nueve. La posición de
Suárez en cancha no le permitió tener mayor participación, tampoco feeling con sus compañeros. El
delantero, estaba mucho más aventajado con relación a sus pares, y eso no le
fue favorable al equipo.
Sabemos que el "maestro" tiene una mente brillante y guió a este plantel siempre por el buen camino. Debemos esperar su siguiente jugada
para tener una opinión más critica de toda visión general, este encuentro dentro
de todo, no fue el más importante. Aun así esperemos, que nuestro “pistolero”
no se desespere por marcar el gol. Tranquilo “Lucho”, no entres en la obsesión de convertir,
que cuando menos lo pienses mejor sale. A tranquilizarnos, sin mucha presión.
Siempre usando la cabeza que así, siempre jugamos mejor.
El 6 de setiembre Uruguay juega su octava etapa de 18 en Eliminatorias. Esperemos
que la Celeste mejore estos y otros aspectos para que la noche del martes salga
“redonda” en el Estadio Centenario frente a Paraguay.
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